viernes, 14 de enero de 2011

Tanto tiempo en ti había soñado, a la salida del baile por ti había esperado. Esa noche era el momento indicado para decirte cuanto te había amado. Pero vos no querías escuchar sólo querías divertirte y bailar… Querías presumir, querías alardear pero no me querías amar. La vida está hecha de momentos: momentos malos, momentos buenos. Pero no perdimos el tiempo, porque cuando nos amamos fue un amor eterno. Ahora me queda el recuerdo y una frase escrita en el cuaderno. Un amor verdadero y sincero no termina más, nunca es pasajero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario